El zorro, concentrado en su labor, no se percató de su alrededor, donde todos los conejos que en aquella pradera vivían, se habían reunido para verlo trabajar, e incluso, uno de ellos, consternado por la situación se acercó y le dijo:
- ¿Qué haces zorro?
- Estoy tratando de derrumbar esta madriguera para comerme a los conejos que viven ahí dentro, muero de hambre.
-Pero...
-Cállate, conejo, no me distraigas y déjame trabajar.
Así, el zorro gastó todas sus energías tratando de derrumbar aquella madriguera vacía y murió de hambre.
FIN.
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