348 - En observación.

- ¿Quiere un poco más de té Señor?
....
- ¿Y usted Mi-lady?
...
- ¡Jajaja! ¡Qué velada tan encantadora!

    Y desde la circular ventana de la puerta por la que lo observaba, supe de inmediato que ese paciente necesitaba una dosis más alta de su medicamento y, por lo menos, dos años más de encierro en en esta horrible casa de locos.

FIN.

Comparte este Post: