847 - Los adúlteros.

Sir Helder Amos | viernes, mayo 29, 2015 | |
- Y dime ¿estás casado? - le preguntó ella coquetamente, a pesar de que se había percatado del anillo de matrimonio que él llevaba en el dedo anular. 

- ¿Casado? ¿Yo? - dijo el hombre, escondiendo sus manos debajo del bar y quitándose el anillo - No, no, no, ni en juego, yo estoy solterito - continuó diciendo mientras alzaba las manos y señalaba su dedo anular para que ella viera que no llevaba ningun anillo.

Y después de un par de minutos de plática caliente, ambos, conscientes de lo que iban a hacer, subieron juntos a la habitación. 

Fin. 

Comparte este Post: