- El águila aterrizó en el nido. Cambio.
- ¿Ah? ¿Qué dices, mi niño?
- Que el águila aterrizó en el nido. Cambio.
- ¿Qué águila? ¿De qué hablas?
- ¡Ay, mamá! ¡Qué ya llegue a casa! -explicó el niño, enojándose y colgando el teléfono estruendosamente.