Pero pronto, la inteligencia de MarieAnn pasó de convertirse de un don a una maldición, porque al darse cuenta que estaba rodeada de seres inferiores a ella, MarieAnn empezó a odiar a la humanidad y al mundo en el que vivía.
Así que MarieAnn empezó a trabajar en una forma de aniquilar a todos los humanos estúpidos que la rodeaban y destruir el mundo, pero al ser tan inteligente, MarieAnn, se dio cuenta de que tal matanza y destrucción no eran necesarias, porque la solución a su odio era todo lo contrario.
Y con un último "Los odio a todos" MarieAnn se despidió de este mundo.
FIN.
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