704 - El amor rompe fronteras.

Sir Helder Amos | domingo, septiembre 29, 2013 |
Su corazón se acelero, cuando vio su cara por primera vez en el aeropuerto.

Fin.

703 - Uno cruel.

Sir Helder Amos | jueves, septiembre 26, 2013 |
- Nunca te amé - le susurró al oído después de que ella finalmente le diera su virginidad.

Fin

702 - El secreto del alquimista.

Sir Helder Amos | miércoles, septiembre 18, 2013 |
Cuando el alquimista sirvió la cena en una vajilla de oro, todos sus invitados le preguntaron:

- ¿Cómo has obtenido tan majestuosa vajilla?

- ¿La vajilla? Bueno... Ehh... Está vajilla fue un presente que me hizo el Rey por hacerle un favor, sí, fue un regalo del Rey - respondió el alquimista nerviosamente al mismo tiempo de que se ponía la mano sobre su túnica para cerciorarse de que la piedrita color escarlata siguiera en su bolsillo.

Fin. 

701 - Ley de la gravitación universal.

Sir Helder Amos | jueves, septiembre 12, 2013 |
En un caluroso y soleado día de verano, Isaac se sentó bajo la sombra de un árbol de manzanas para refrescarse; y mientras se entretenía viendo como las hojas del árbol caían lentamente hacía el suelo cada vez que hacía una brisa ligera, una idea, como caída del árbol, le vino a la mente.

Fin.

700 - El brindis.

Sir Helder Amos | viernes, septiembre 06, 2013 |
Cuando todos se levantaron y alzaron sus copas para brindar por la salud del Rey, el Principe, quien había estado envenenado a su padre para obtener la corona, cruzó los brazos, mal humorado, y ni siquiera se dignó a sostener su copa entre sus manos.

Fin.

699 - Tips de actuación.

Sir Helder Amos | lunes, septiembre 02, 2013 |
- Y recuerden, chichos - dijo el artista hacía sus alumnos - en el teatro, es más fácil interpretar los roles de  personas félices, porque el ser humano, así esté triste, está acostumbrado a disimular su tristeza y a aparentar ser feliz  para guardar las apariencias, en cambio, interpretar los roles de personas tristes, es más díficil, porque cuando el ser humano se siente feliz, no está acostumbrado a disimularlo, si no que, al contrario,  se jacta del sentimiento y le hace saber a todo el mundo sobre ello.

Fin.